Wifi on the road

Hace un tiempo, Nautilia trató el tema de cómo podían cambiar las cosas para la gente que viaja si se generalizaban las tarifas de datos con la llegada del iPhone. En esto, países como Japón y EEUU van bastante por delante. Allí, muchas tarifas de móviles incorporan casi por defecto un pack de internet.
En Japón, por ejemplo, se calcula que el 75% de los usuarios de móvil navega con él por internet (fuente El País, a raíz de éxito de las novelas escritas para leer en el móvil).
En EEUU, seguramente el proceso se consolida desde un ámbito más profesional, con los sistemas que permiten recibir y enviar correos electrónicos en el acto. (Blackberry...).
Sea como sea, la cuestión es que la gente cada vez está más conectada a internet mientras se mueve. Y esto, para los viajes, puede ser una gran ayuda.

Encontrar la conexión
La gran pega de las tarifas de datos es que el coste se dispara al salir de la cobertura de tu compañía. El precio por kb descargado se multiplica por 10 o más si quieres conectarte a internet vía red de móviles en otro país. Para evitar esto, lo mejor es contar con un dispositivo con wifi. Muchos aparatos pequeños ya lo tienen: móviles, algunos iPod, pda, ordenadores...
El problema del wifi es que no hay en todos los sitios, y donde sí que hay, a veces es de pago. Pero mientras se está en una ciudad, casi siempre existe alguna forma de conectase gratis.
Hay proyectos, como el de Fon, de crear una red wifi global, pero de momento, aunque haya habido intentos como el de cubrir todo el barrio de Akihabara, en Tokio, el proyecto está lejos de completarse.

Más allá de los intentos globales, hay otros de pequeña escala que suman en el camino a la cobertura general. Por ejemplo, como Nautilia ha podido comprobar, los autocares con wifi gratis (Boltbus en EEUU, Alsa en España, Oxford Tube en el Reino Unido...), las pruebas para instalarlo en aviones (de pago), los hoteles (generalmente los más modestos lo ofrecen sin coste adicional), las entidades culturales (bibliotecas, museos...) o otros muchos sitios: restaurantes de comida rápida (los McDonalds de Suiza ofrecen media hora gratis al día), paradas de autobús (la empresa de transporte de Buffalo, en EEUU, ofrece wifi en algunas paradas), en la calle (ayuntamientos o comunidades instalan conexiones: Barcelona, Ginebra, Downtown Alliance en Nueva York y muchas otras).
Y si no, siempre queda la no muy elegante opción de intentar buscar una conexión sin protección en cualquier lugar.

Y cuando me conecte, ¿qué?
Aquí viene la parte más viajera de la entrada.
Hay una serie de herramientas para los distintos aparatos (no hace falta tener un iPhone) que ayudan muchísimo mientras se está en movimiento.
La herramienta número 1, de momento, es Google Maps para móviles. El problema, alguna vez se ha dicho, es que no guarda los mapas en la memoria y siempre hay que estar conectado. Pero a cambio de eso, lo que obtiene es mucho. De entrada, calcula la ubicación de ese momento según las antenas de móvil cercanas, sin necesidad de tener un GPS. Y después, la herramienta 'buscar' es un salvavidas viajero. Por ejemplo, se busca 'supermercado' y al instante aparecen unas marcas rojas en el mapa y un listado de resultados en función de dónde estamos.
Y quien dice 'supermercado' dice 'souvenir', 'restaurante italiano', 'alquiler bicicletas'...
Google Maps busca en varias bases de datos y ofrece información básica sobre el punto de interés y un link si estuviera disponible. Además, calcula rutas, busca direcciones, y si estás en lugar cubierto por Google Transit, te dice cómo llegar en transporte público.

Otra herramienta curiosa es Lightpole, una herramienta para descubrir POI (puntos de interés, como en los GPS). La idea es que, con una posición dada (a mano o a través del GPS del móvil), se pueda acceder a datos cercanos, como artículos de la Wikipedia georreferenciados, una lista de hotspots wifi, información de Yelp (una base de datos con más de 4 millones de comentarios de usuarios, especialmente de EEUU, sobre restaurantes, hoteles, tiendas...) o nuestro preferido, los Bathroom Diaries, una base de datos sobre lavabos públicos, cómo encontrarlos y puntuación sobre su nivel de limpieza.

Un clásico viajero es WorldMate, un programa parcialmente gratuito, que actualiza al día la previsión del tiempo y la cotización de las divisas (y hace de conversor). Si se paga, se puede además acceder a información sobre vuelos.

Y con un poco de búsqueda, es fácil encontrar conversores de todo tipo y algunas otras utilidades. El iPhone, a través de la Apple Store, tiene decenas de utilidades viajeras, la mayoría gratuitas.

¿Y si no quiero instalar nada?
Entonces la alternativa son las páginas web adaptadas a teléfonos móviles. Casi todas las grandes cadenas de hoteles tienen una versión móvil que permite hacer, cambiar o anular reservas.
Muchos de los servicios de críticas de hoteles y restaurantes, como el citado Yelp, tienen también esta versión. O, más allá aún, la edición móvil de Lonely Planet, da un listado de cosas para ver, sitios para comer y lugares donde dormir alrededor de una dirección, con información extraida de sus guías.
O todavía otro ejemplo de uso. El Museo de Arte Moderno de Nueva York, MoMA, tiene wifi en todo el edificio e invita a los visitantes a que se conecten con su dispositivo y desde él lancen la audioguía de las salas. Al entrar en una sala, se teclea el número del cuadro en una página que aparece tras conectarse (como en las audioguías clásicas) y se lanza la pista de sonido correspondiente (de hecho, se descarga un mp3 al móvil y este lo reproduce; también se puede hacer desde casa).
Las aerolíneas, por su parte, también están entrando en la era móvil. Algunas, como Vueling, permiten comprar billetes desde el móvil. Algunas más, aunque no vendan, sí que permiten hacer la facturación online. Y los últimos desarrollos van en la dirección de esos códigos de reserva y facturación sean imágenes que se envíen al móvil y sólo haya que enseñar la pantalla con esta imagen para entrar en el avión.

Así pues, tal vez sea posible dentro de poco viajar sólo con un móvil (y un único cargador!), sin perderse nada.

6 comentarios :

  1. Hola, como estas, tu pagina esta excelente, si queres pasate por mi pagina y dejame un comentario, estan entrando mucho en mi sitio, si te interesa podemos hacer un intercambio de links, banners, cualquier cosa avisame, te dejo mi email tvinternet08@gmail.com, te mando un abrazo.

    ResponderEliminar
  2. cómo acabó la sopita en el Arts? vistéis algun famoso?? ;)

    ResponderEliminar
  3. mruz, me temo que no. Solo pensaba en dormir.

    ResponderEliminar
  4. no deja de ser curioso que mientras que el wifi se hace más y más popular y que en viajes en autobús y cafeterías se permita la conexión gratis, en hoteles de 5* sea siempre de pago :(

    ResponderEliminar